Es ahora más que nunca cuando la innovación se presenta como un elemento clave y crítico para la supervivencia y desarrollo a largo plazo de las empresas. La innovación afecta a todas sus áreas funcionales, desde la del diseño y el desarrollo de bienes y servicios, la comunicación y el marketing, hasta la internacionalización, los recursos humanos, los procesos o la gestión empresarial. Un artículo de El Financiero aclara que es fundamental ser innovador en el mercado para mantener a los clientes. La innovación no es simplemente la creatividad y el avance tecnológico. Se trata de un concepto más amplio, implica cambiar modelos de negocios, comportamientos, procesos, con un resultado de valor. La competencia es cada vez mayor, ¡Las empresas que no sean innovadoras se quedarán atrás!